Me has roto el corazon

5 de octubre de 2025

El Dr. José Carbonell explica que cuando alguien rompe una relación y deja un vacío lleno de dolor, es normal sentirse destrozado y vivir un proceso de duelo. Subraya que no se puede forzar a otra persona a quedarse, por lo que lo esencial es aceptar su decisión y empezar a mirar por uno mismo. Recomienda dar espacio, cortar los contactos que dificulten la recuperación y permitirse sufrir sin buscar compensaciones inmediatas. Señala que este tiempo de reconstrucción personal ayuda a reconectar con uno mismo, crecer y transformarse en una mejor versión, recordando que siempre habrá luz al final del túnel.

Por Instituto Carbonell 4 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando el sexo en pareja deja de ser satisfactorio, lo fundamental es hablarlo con claridad y complicidad , aunque resulte difícil expresarlo. Señala que es importante comunicar si el deseo ha cambiado o si la experiencia ya no resulta gratificante, y hacerlo sin miedo, buscando soluciones conjuntas. Recomienda, además, recurrir a un terapeuta o especialista en sexualidad si la comunicación directa no basta, de manera que se pueda intentar recuperar la conexión antes de considerar el fin de la relación.
Por Instituto Carbonell 3 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que comenzar una relación pensando que “no va a durar” es una forma de autoprotección, pero en realidad conduce a un autosabotaje. Señala que esta actitud hace que uno se enfoque en los aspectos negativos para confirmar su creencia de que la relación fracasará. Recomienda equilibrar la perspectiva: no se trata de idealizar ni de ignorar los problemas, sino de dar una verdadera oportunidad a la relación y permitir que la realidad demuestre si puede funcionar de manera natural.
Por Instituto Carbonell 2 de octubre de 2025
Los celos no siempre aparecen por lo que pasa en el presente. A veces surgen mirando al pasado, cuando la figura de la expareja de quien hoy es tu compañero o compañera se convierte en una sombra constante. A este fenómeno se le ha llamado “Síndrome de Rebecca”, inspirado en la novela de Daphne du Maurier. En la vida real, esta situación se traduce en lo que conocemos como “celos retrospectivos”: sentir que no se compite contra una persona, sino contra un recuerdo idealizado. Tal como indica Infante, C. en el artículo, los celos no son necesariamente patológicos. Son una emoción humana y universal. El problema surge cuando se vuelven la base de una relación: cuando todo gira en torno al miedo a perder al otro. En el artículo también se explica, la importancia de diferenciar entre lo que sentimos y lo que hacemos con ello. Sentir celos no es malo, pero usarlo como excusa para controlar o invadir la intimidad de la pareja sí lo es. Los celos pueden convertirse en un verdadero problema cuando dejan de ser una emoción pasajera y se instalan como un hábito en la relación, cuando la atención se centra de forma obsesiva en la expareja o cuando la relación parece sostenerse solo a partir de la inseguridad. En muchos casos, estos celos pueden surgir de inseguridades propias, experiencias pasadas o comparaciones que hemos aprendido a hacer desde nuestra historia personal. No se trata de controlar a la otra persona, sino de miedos internos sobre no ser suficiente o de sentir que podemos perder el afecto de quien queremos. En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda, no podemos elegir qué emociones aparecen, pero sí aprender a gestionar cómo reaccionamos ante ellas. Compararnos con otros solo nos roba tranquilidad, cuando lo realmente importante es reconocer que cada persona tiene su propio valor. Y si los celos comienzan a afectar la relación o generan malestar en alguna de las partes, lo más recomendable es acudir a un profesional de la salud mental que pueda acompañar y orientar en este proceso.