QUEJARSE AFECTA A NUESTRO CEREBRO

13 de diciembre de 2024

Quejarnos es algo común y, a veces, sirve para desahogarnos o conectar con otros. Sin embargo, cuando lo hacemos constantemente, puede dañar nuestra salud mental, emocional y física.


Según menciona García, M.J. en un artículo de The Conversation nuestro cerebro está diseñado para enfocarse en lo negativo, algo útil para sobrevivir en el pasado, pero que hoy puede hacernos más pesimistas y menos resilientes. Además, quejarnos todo el tiempo puede afectar funciones como resolver problemas y tomar decisiones, aumentando nuestra frustración y ansiedad. 


Para cambiar de actitud y mejorar las formas de afrontamiento e interacción nos recomienda:


  • Practica la gratitud: enfócate en lo bueno y escribe por qué estar agradecido.
  • Busca soluciones: en vez de quejarte, piensa en cómo mejorar las cosas.
  • Cuida tus palabras: usa un lenguaje más positivo o neutral. 
  • Pon límites: evita conversaciones que solo giren en lo negativo.


La clave está en ser conscientes del hábito y trabajar en cambiarlo. Quejarse no es malo, es natural y en ocasiones necesario, pero hacerlo todo el tiempo sí.



En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda estos son unos buenos consejos para mejorar nuestra salud mental.

Por Instituto Carbonell 14 de octubre de 2025
Los cambios estacionales como las altas temperaturas o el frío pueden suponer un papel importante en la variación emocional de algunas personas, pero más allá de esto, los ciclos anuales de invierno, primavera, verano y otoño, también pueden interferir en el comportamiento y estado de ánimo.  En el artículo Echeburúa, E. denomina a este suceso como “meteorosensibilidad”, esto se puede manifestar de diferentes formas: - En zonas geográficas o épocas en las que hay inviernos largos con poca luz solar se produce una disminución de serotonina (neurotransmisor clave para el estado de ánimo, la motivación y la energía) y alteraciones en la melatonina que pueden producir trsiteza, pensamientos negativos, cansancio, sentimientos de culpabilidad, entre otros. - En zonas donde hay mucho viento se asocia con sensación de irritabilidad, agobio, insomnio y fatiga. También con nerviosismo, problemas de concentración y dolores de cabeza. - En casos de olas de calor bruscas pueden descompensar a pacientes con ciertos trastornos mentales graves. En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda, es importante tener en cuenta como influyen estos factores en nuestro estado de ánimo, sobre todo en personas que ya se encuentran en manos de profesionales de la salud mental, para así poder llevar a cabo un buen seguimiento y apoyo ante la posibilidad de experimentar alguno de estos síntomas.
Por Instituto Carbonell 5 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando alguien rompe una relación y deja un vacío lleno de dolor, es normal sentirse destrozado y vivir un proceso de duelo. Subraya que no se puede forzar a otra persona a quedarse, por lo que lo esencial es aceptar su decisión y empezar a mirar por uno mismo. Recomienda dar espacio, cortar los contactos que dificulten la recuperación y permitirse sufrir sin buscar compensaciones inmediatas. Señala que este tiempo de reconstrucción personal ayuda a reconectar con uno mismo, crecer y transformarse en una mejor versión, recordando que siempre habrá luz al final del túnel.
Por Instituto Carbonell 4 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando el sexo en pareja deja de ser satisfactorio, lo fundamental es hablarlo con claridad y complicidad , aunque resulte difícil expresarlo. Señala que es importante comunicar si el deseo ha cambiado o si la experiencia ya no resulta gratificante, y hacerlo sin miedo, buscando soluciones conjuntas. Recomienda, además, recurrir a un terapeuta o especialista en sexualidad si la comunicación directa no basta, de manera que se pueda intentar recuperar la conexión antes de considerar el fin de la relación.