Claves para gestionar el “teletrabajo”

7 de abril de 2020
En España, un 4% de la población activa ya teletrabajaba según el INE. Ahora por la situación en la que nos encontramos, ha aumentado el número de empresas que han aplicado esta forma para seguir con su actividad laboral. Este cambio implica que los trabajadores han tenido que modificar su rutina, sus tareas, e incluso sus objetivos laborales. Esta novedad, para muchos, puede causar un aumento del estrés porque no saben cómo organizarse y optimizar su tiempo de trabajo. 

José Miguel Sánchez, experto en psicología del trabajo, comenta en el artículo “La guía para que el teletrabajo no acabe con tus nervios y tu energía” (ABC, 2020), algunas claves para mejorar la experiencia con el teletrabajo:

  1. Seguir con el horario habitual al que estamos acostumbrados.
  2. Marcar objetivos diarios realistas.
  3. Buscar un sitio donde establecer nuestro “lugar de trabajo” en casa. Si vivimos con más gente, por ejemplo con niños o adolescentes, es importante tener nuestro espacio y explicar cuál será nuestra jornada laboral.
  4. Programar las tareas para no permitir que se extiendan más allá del horario establecido.
  5. Incluir los descansos en la jornada. Debemos hacer descansos, cada 50 minutos de trabajo efectivo. 
  6. Incorporar momentos de ocio. Si podemos manejar nuestro horario de trabajo, es recomendable introducir momentos de desconexión para hacer aquellas cosas que nos gustan como ejercicio, hobbies o hablar con nuestros familiares.  
  7. Gestiona tu energía. Se recomienda hacer las tareas más difíciles o que menos nos gustan, cuando nos encontremos mejor.
  8. Prestar atención a nuestro estado de ánimo, lo que nos permitirá gestionarnos mejor.

En opinión del Dr. Carbonell, el teletrabajo requiere de entrenamiento y acostumbrarse a él. En la situación de cuarentena en que vivimos no podemos realizar un proceso gradual de adaptación por lo que es normal encontrarse desbordado, bloqueado, e incluso desesperado. Todo lo anterior es normal por lo que hay que ser paciente e indulgentes con uno mismo. Si vemos que en el proceso, el nivel de estrés nos impide funcionar adecuadamente, tanto a nivel laboral como a nivel personal, es de utilidad recurrir a un profesional de la salud mental para ayudarnos en ese proceso de adaptación. 

Por Instituto Carbonell 14 de diciembre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que no existe una diferencia de edad perfecta en la pareja, porque lo verdaderamente determinante no son los años, sino la conexión emocional. Señala que en consulta ha visto parejas con grandes diferencias de edad —tanto hombres mayores con mujeres más jóvenes como a la inversa— que funcionan muy bien gracias a su complicidad, afinidad intelectual, intereses compartidos y energía similar. Destaca que ninguna edad garantiza que una relación vaya a durar, del mismo modo que tampoco lo hacen otros factores como la cultura, los hijos o los proyectos en común. Por ello, recomienda no dejarse influir por la opinión social y centrarse en lo que la relación aporta a quienes la viven. Concluye afirmando que, más allá de estadísticas o prejuicios, lo esencial es cómo cada pareja cuida su vínculo y afronta sus propias complejidades.
Por Instituto Carbonell 13 de diciembre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que en la vida, y especialmente en el amor, no todo vale. Señala que aunque tengamos objetivos personales o afectivos, jamás debemos alcanzarlos a costa de manipular, engañar o pasar por encima de los sentimientos de los demás. Advierte que actuar sin límites éticos nos convierte en personas que buscan su propio placer o gratificación sin considerar el daño causado, y eso tiene consecuencias. Subraya que vivimos rodeados de personas con emociones reales, que confían en nuestras palabras y pueden sufrir si usamos esas palabras solo para obtener lo que queremos. Concluye recordando que, igual que no queremos que nos hagan daño, tampoco debemos causarlo: no todo vale y nuestras acciones siempre tienen impacto.
Por Instituto Carbonell 12 de diciembre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando una relación no fluye de manera natural —ya sea con amistades del pasado, con una expareja, con hijos o con los propios padres— forzarla solo genera desgaste y tensiones innecesarias. Señala que es legítimo intentar recuperar la cordialidad, pero también es esencial reconocer el punto en el que el esfuerzo deja de ser sano y empieza a perjudicar nuestro bienestar. Añade que no debemos supeditar nuestra vida al deseo de obtener perdón o restaurar algo que no avanza por sí solo. Concluye que, si las cosas fluyen, adelante; pero si no, no vale la pena sacrificar la salud emocional intentando que funcione lo que no está preparado para funcionar.