Crean un dispositivo que advierte del inicio de crisis epilépticas

28 de febrero de 2020

La epilepsia es un trastorno del sistema nervioso central (neurológico). Provoca convulsiones, sensaciones inusuales, pérdida de conciencia, … porque la actividad cerebral de algunas zonas deja de funcionar correctamente. Cualquier persona puede desarrollar epilepsia. En el mundo, alrededor de 50 millones de personas padecen esta enfermedad.

Esta enfermedad dificulta tener una vida normal por diferentes motivos. En primer lugar, la persona vive en un estado continuo de inseguridad porque no sabe cuándo ocurrirán los ataques. Esto lleva a sufrir de estrés, ansiedad e incluso depresión.

Para resolver este problema, la startup MJN Neuroserveis va a lanzar un dispositivo que advierte de una crisis epiléptica minutos antes de que suceda. Por lo que las crisis dejarán de ser impredecibles y la inseguridad disminuirá, mejorando el estado emocional de los pacientes. El dispositivo tiene unos sensores que registran la actividad eléctrica del cerebro para enviarla, por bluetooth, a un teléfono móvil. Cuando el riesgo de tener una crisis epiléptica es elevado, se envía una alarma al móvil para avisar al paciente o al cuidador. Esto ayuda a que la persona se coloque en un posición segura durante una crisis y evitar accidentes o lesiones. Por lo tanto, el dispositivo mejorará la calidad de vida de las personas afectadas. Es importante seguir investigando la enfermedad para conseguir avances en el tratamiento (ABC, 2019).

En segundo lugar, otro problema es el estigma social asociado a la enfermedad. Según la OMS, la discriminación que sufren las personas con epilepsia es, a menudo, más difícil de vencer que las convulsiones. Por eso, hay que aumentar la integración de las personas afectadas para conseguir la normalización de la enfermedad.

Si nos encontramos ante esta situación o conocemos a alguien, debemos acudir a profesionales de la salud mental que nos ayudarán a sobrellevar la enfermedad y mejorar nuestro estado de ánimo.

Por Instituto Carbonell 11 de junio de 2025
El Dr. Carbonell aborda el fenómeno de la doble vida, un comportamiento que, aunque sorprendente, ha observado en numerosas ocasiones a lo largo de su experiencia clínica. Explica que existen personas que son capaces de mantener dos vidas paralelas —en ocasiones, incluso dos familias distintas— sin que una sepa de la existencia de la otra. Este tipo de comportamiento no siempre está asociado a perfiles extravagantes o fácilmente sospechosos; al contrario, muchas veces proviene de personas aparentemente normales, discretas y sencillas, lo que genera una gran sorpresa en quienes las rodean. El Dr. Carbonell subraya que su función como profesional no es juzgar, sino comprender y acompañar. No obstante, pone el foco en quienes sufren las consecuencias de estas dobles vidas: las víctimas, que pueden descubrir años después la existencia de otra familia, otros hijos, u otra vida completamente desconocida. A esas personas les recuerda que no tienen ninguna culpa de lo ocurrido y que la responsabilidad recae únicamente en quien eligió vivir con ocultamientos y engaños. En cuanto a las personas que llevan esa doble vida, muchas veces, cuando intentan justificar sus actos, reconocen que la situación se les fue de las manos. Afirman que no supieron cómo ponerle fin, ni a quién elegir, y que, finalmente, aprendieron a sostener ambas realidades simultáneamente, aunque ello implicara una gran carga emocional y, en muchos casos, daño colateral. En definitiva, el Dr. Carbonell confirma que sí, existen personas capaces de llevar una doble vida, pero lamentablemente, los que más sufren no son quienes la viven, sino quienes la descubren tarde y deben reconstruir su mundo emocional a partir de esa traición.
Por Instituto Carbonell 10 de junio de 2025
El Dr. Carbonell reflexiona sobre una situación común en las relaciones sociales: cuando dos personas cercanas, amigos o conocidos, presentan versiones diferentes de un mismo conflicto y nos piden que tomemos partido. Ante esta disyuntiva, subraya que ambas personas pueden tener razón desde su propia perspectiva, ya que cada uno interpreta la realidad a través de su experiencia emocional y subjetiva. El Dr. Carbonell aconseja no intervenir directamente ni posicionarse a favor de una de las partes. En cambio, propone escuchar con empatía a ambos, recordando que, muchas veces, lo único que buscan es ser comprendidos, más que tener razón. Tomar partido solo puede llevar a tensiones innecesarias, e incluso al deterioro de las relaciones con uno u otro amigo. Además, advierte que involucrarse en un conflicto ajeno, incluso si nos presentan pruebas como mensajes, vídeos o imágenes, puede colocarnos en una posición incómoda o comprometida. Al brindar apoyo a uno, es fácil que el otro se sienta traicionado o juzgado, algo que no es deseable si se quiere mantener una relación saludable con ambos. En conclusión, el Dr. Carbonell recomienda mantener una postura neutral y no dejarse arrastrar por dinámicas de confrontación entre terceros. Cada uno tiene su versión legítima de los hechos y no es nuestra responsabilidad resolver un conflicto que no nos pertenece.
Por Instituto Carbonell 9 de junio de 2025
El Dr. Carbonell explica que los líos amorosos suelen surgir con frecuencia en contextos específicos, especialmente durante los viajes. Aunque una persona pueda tener una relación estable, con planes de futuro y todo aparentemente en orden, al irse de viaje puede experimentar un cambio de perspectiva emocional. En ese entorno diferente, con la sensación de libertad y desconexión de la rutina, es común que aparezca alguien que parece encarnar una conexión única o idealizada. El Dr. Carbonell advierte que en estos escenarios se altera temporalmente la escala de valores, ya que se entra en un estado de disfrute y apertura, compartido también por la otra persona involucrada. Este ambiente artificial puede hacer que todo se sienta más intenso o mágico de lo que realmente es. Además, señala que la falta de sueño, el aumento de actividad social y la vulnerabilidad emocional del momento favorecen este tipo de situaciones. Por ello, el Dr. Carbonell recomienda precaución. Aunque estos encuentros pueden parecer emocionantes, al regresar a la vida cotidiana pueden tener consecuencias serias. Muchas veces, se pone en riesgo todo lo construido en una relación sólida por una experiencia breve pero intensa. Concluye subrayando la importancia de reflexionar antes de actuar, especialmente cuando lo que está en juego es el bienestar emocional propio y de los demás.