Efectos psicológicos del cambio de horario

2 de noviembre de 2017

El cambio de hora al que nos acabamos de someter y que anuncia la pronta llegada del invierno, puede provocar alteraciones en nuestro estado de ánimo. En principio no tiene porque ir más allá de síntomas leves como cansancio, somnolencia y cierta apatía, pero en personas sensibles o con cuadros depresivos puede agravar temporalmente su sintomatología.

La principal explicación de este suceso es que al disminuir las horas de luz, aumenta la secreción de una hormona llamada melatonina , que es la encargada de regular los ciclos del sueño. Nuestro organismo sigue funcionando en base al horario lumínico y no en base al horario establecido, por eso nos sentimos más cansados antes de lo normal. Por su parte, la somnolencia y el cansancio pueden causar irritabilidad, falta de concentración y alteraciones en el estado de ánimo.

Además, también se puede ver alterada la serotonina que regula la ansiedad y el estado de ánimo. Cada vez hay mas pruebas que respaldan que el motivo de ello es que el sistema serotoninérgico está influenciado por la luz.

Cualquier modificación en nuestros hábitos requiere de un proceso de adaptación, para que nuestro organismo logre incorporar estos cambios. Este proceso afecta de distinta manera de acuerdo a la edad de la persona, siendo los niños y las personas mayores los que suelen presentar mayores dificultades para este ajuste .

Todo ello explica por qué las personas con depresión se ven especialmente afectadas por el cambio de hora.

Estudios realizados en Inglaterra en la década de los 90, revelaron que el 90% de las personas experimentan cambios sutiles en el estado de ánimo, energía y sueño con el cambio horario.

En opinión del Dr. Carbonell debemos estar alerta, especialmente en aquellas personas mas sensibles, a que los síntomas de adaptación perduren en el tiempo o empeoren los síntomas ansiosos depresivos. Hay que recurrir a un profesional de la salud mental si esto ocurriera.

 

 

 

 

Por Instituto Carbonell 14 de octubre de 2025
Los cambios estacionales como las altas temperaturas o el frío pueden suponer un papel importante en la variación emocional de algunas personas, pero más allá de esto, los ciclos anuales de invierno, primavera, verano y otoño, también pueden interferir en el comportamiento y estado de ánimo.  En el artículo Echeburúa, E. denomina a este suceso como “meteorosensibilidad”, esto se puede manifestar de diferentes formas: - En zonas geográficas o épocas en las que hay inviernos largos con poca luz solar se produce una disminución de serotonina (neurotransmisor clave para el estado de ánimo, la motivación y la energía) y alteraciones en la melatonina que pueden producir trsiteza, pensamientos negativos, cansancio, sentimientos de culpabilidad, entre otros. - En zonas donde hay mucho viento se asocia con sensación de irritabilidad, agobio, insomnio y fatiga. También con nerviosismo, problemas de concentración y dolores de cabeza. - En casos de olas de calor bruscas pueden descompensar a pacientes con ciertos trastornos mentales graves. En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda, es importante tener en cuenta como influyen estos factores en nuestro estado de ánimo, sobre todo en personas que ya se encuentran en manos de profesionales de la salud mental, para así poder llevar a cabo un buen seguimiento y apoyo ante la posibilidad de experimentar alguno de estos síntomas.
Por Instituto Carbonell 5 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando alguien rompe una relación y deja un vacío lleno de dolor, es normal sentirse destrozado y vivir un proceso de duelo. Subraya que no se puede forzar a otra persona a quedarse, por lo que lo esencial es aceptar su decisión y empezar a mirar por uno mismo. Recomienda dar espacio, cortar los contactos que dificulten la recuperación y permitirse sufrir sin buscar compensaciones inmediatas. Señala que este tiempo de reconstrucción personal ayuda a reconectar con uno mismo, crecer y transformarse en una mejor versión, recordando que siempre habrá luz al final del túnel.
Por Instituto Carbonell 4 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando el sexo en pareja deja de ser satisfactorio, lo fundamental es hablarlo con claridad y complicidad , aunque resulte difícil expresarlo. Señala que es importante comunicar si el deseo ha cambiado o si la experiencia ya no resulta gratificante, y hacerlo sin miedo, buscando soluciones conjuntas. Recomienda, además, recurrir a un terapeuta o especialista en sexualidad si la comunicación directa no basta, de manera que se pueda intentar recuperar la conexión antes de considerar el fin de la relación.