La depresión en el embarazo y en el postparto

23 de enero de 2020

El embarazo es una etapa de cambios no solo físicos, sino también hormonales relacionados con el estado emocional. Ante la llegada del bebé, nos surgen dudas, preocupaciones, estrés, contradicciones … Y es posible que no tengamos fuerzas para afrontar la maternidad. Esta situación puede ser normal en un periodo de tiempo. Pero cuando se alarga y no llegamos a adaptarnos a la nueva etapa, podemos estar sufriendo una depresión.

La depresión es una alteración del estado de ánimo en la cual la persona se encuentra en una profunda tristeza que se prolonga en el tiempo. Es una enfermedad que no siempre es fácil detectarla, y más cuando quien la padece es una mujer embarazada pues algunos síntomas de la depresión como cambios en el sueño, en el nivel de energía o en el apetito, son también comunes en el embarazo. Pero si estos van acompañados de otros síntomas como ansiedad excesiva hacia el bebé, baja autoestima, no disfrutar de momentos positivos, pensamientos negativos constantes, … Es cuando hay que prestar atención al problema. Hay que tener en cuenta que esta enfermedad puede aparecer tanto al inicio del embarazo como después del parto, conocida como depresión postparto, o incluso que la madre la padeciera antes de quedarse embarazada.

En el artículo “ Las secuelas de no prevenir la depresión en el embarazo ” (El país, 2019), María de la Fe Rodríguez, experta en psicología perinatal, explica “una madre con depresión tiende a ocultar su estado de tristeza porque siente vergüenza o culpa de no estar bien anímicamente por el nacimiento de su hijo. Por eso no piden ayuda”.

Ricardo Muñoz, profesor de la Universidad de Palo Alto (EEUU), ha publicado un artículo en la revista Nature sobre la importancia de la prevención y el tratamiento de la depresión en mujeres embarazadas en el cual analizó 32 estudios y demostró que con tratamiento los episodios depresivos se reducen un 21%, y en algunos casos, el 50%.

Si nos encontramos en esta situación o conocemos a alguien que pueda estarlo, es importante acudir a un profesional de la salud mental, ya que los problemas se pueden prolongar en el tiempo y empeorar. Con la prevención y el tratamiento conseguiremos un efecto positivo sobre el bienestar de la madre y del bebé.

La Asociación Española de Psicología Perinatal (Aepp) recomienda el tratamiento psicológico como principal solución. En el caso de que fuera necesario, se complementaría con un tratamiento farmacológico. También aporta una serie de consejos: expresar los sentimientos, descansar siempre que puedas, evitar hacer un cambio importante en tu vida durante el embarazo o después de dar a luz, … Hay que tener en cuenta que el estado emocional de la madre afecta al bebé, por eso un buen diagnóstico puede proteger la salud física y mental de ambos. Promover un entorno adecuado, interviniendo en los aspectos que puedan alterar el bienestar.

En opinión del Dr. Carbonell, se están dando grandes pasos en la identificación, prevención y tratamiento de la depresión en el embarazo y en el postparto. Estar mal durante este periodo no es normal y hay que buscar ayuda lo antes posible.

Por Instituto Carbonell 14 de octubre de 2025
Los cambios estacionales como las altas temperaturas o el frío pueden suponer un papel importante en la variación emocional de algunas personas, pero más allá de esto, los ciclos anuales de invierno, primavera, verano y otoño, también pueden interferir en el comportamiento y estado de ánimo.  En el artículo Echeburúa, E. denomina a este suceso como “meteorosensibilidad”, esto se puede manifestar de diferentes formas: - En zonas geográficas o épocas en las que hay inviernos largos con poca luz solar se produce una disminución de serotonina (neurotransmisor clave para el estado de ánimo, la motivación y la energía) y alteraciones en la melatonina que pueden producir trsiteza, pensamientos negativos, cansancio, sentimientos de culpabilidad, entre otros. - En zonas donde hay mucho viento se asocia con sensación de irritabilidad, agobio, insomnio y fatiga. También con nerviosismo, problemas de concentración y dolores de cabeza. - En casos de olas de calor bruscas pueden descompensar a pacientes con ciertos trastornos mentales graves. En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda, es importante tener en cuenta como influyen estos factores en nuestro estado de ánimo, sobre todo en personas que ya se encuentran en manos de profesionales de la salud mental, para así poder llevar a cabo un buen seguimiento y apoyo ante la posibilidad de experimentar alguno de estos síntomas.
Por Instituto Carbonell 5 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando alguien rompe una relación y deja un vacío lleno de dolor, es normal sentirse destrozado y vivir un proceso de duelo. Subraya que no se puede forzar a otra persona a quedarse, por lo que lo esencial es aceptar su decisión y empezar a mirar por uno mismo. Recomienda dar espacio, cortar los contactos que dificulten la recuperación y permitirse sufrir sin buscar compensaciones inmediatas. Señala que este tiempo de reconstrucción personal ayuda a reconectar con uno mismo, crecer y transformarse en una mejor versión, recordando que siempre habrá luz al final del túnel.
Por Instituto Carbonell 4 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando el sexo en pareja deja de ser satisfactorio, lo fundamental es hablarlo con claridad y complicidad , aunque resulte difícil expresarlo. Señala que es importante comunicar si el deseo ha cambiado o si la experiencia ya no resulta gratificante, y hacerlo sin miedo, buscando soluciones conjuntas. Recomienda, además, recurrir a un terapeuta o especialista en sexualidad si la comunicación directa no basta, de manera que se pueda intentar recuperar la conexión antes de considerar el fin de la relación.