Consejos doy que para mi no tengo

4 de junio de 2025

El Dr. José Carbonell, médico y psiquiatra, reflexiona sobre una realidad cotidiana y universal: todos damos consejos, pero rara vez los aplicamos en nuestra propia vida. Bajo el popular refrán “consejos doy que para mí no tengo”, expone cómo, ante los problemas ajenos, solemos ser decididos, categóricos y hasta tajantes: “déjalo”, “no le hables más”, “pon límites”, “cántale las cuarenta”. Sin embargo, cuando nos toca vivir situaciones similares, aplicar esas mismas recomendaciones no resulta tan sencillo.


Según el doctor, aconsejar es fácil porque implica hablar desde fuera, sin las emociones, los matices y los vínculos personales que condicionan las decisiones de quien realmente está viviendo la situación. La mayoría de quienes nos aconsejan, aunque tengan buenas intenciones, no tienen acceso a toda la información interna que manejamos nosotros mismos: no saben lo que sentimos, lo que callamos, lo que nos duele, o las razones por las que todavía no podemos dar un paso que desde fuera parece obvio.


Esto no significa que los consejos externos no sean valiosos. Al contrario, Carbonell reconoce que si varias personas del entorno coinciden en una observación, tal vez sea momento de escuchar con atención, ya que puede haber algo que uno mismo no está viendo con claridad, especialmente en momentos de vulnerabilidad emocional.


No obstante, el doctor advierte contra la sobredependencia de la opinión ajena. Si vivimos pendientes de lo que todos opinan o recomiendan, acabaremos alejándonos de nuestras propias convicciones y decisiones, perdiendo libertad personal y, muchas veces, paz mental. Los consejos deben ser tomados como lo que son: puntos de vista, sugerencias externas que se pueden valorar, pero no necesariamente seguir al pie de la letra.


En definitiva, el Dr. Carbonell resalta que si bien aconsejar es fácil, vivir y decidir por uno mismo requiere mucho más coraje y autoconocimiento. Escucha, valora, pero nunca permitas que las voces externas callen tu propia intuición.

Por Instituto Carbonell 14 de octubre de 2025
Los cambios estacionales como las altas temperaturas o el frío pueden suponer un papel importante en la variación emocional de algunas personas, pero más allá de esto, los ciclos anuales de invierno, primavera, verano y otoño, también pueden interferir en el comportamiento y estado de ánimo.  En el artículo Echeburúa, E. denomina a este suceso como “meteorosensibilidad”, esto se puede manifestar de diferentes formas: - En zonas geográficas o épocas en las que hay inviernos largos con poca luz solar se produce una disminución de serotonina (neurotransmisor clave para el estado de ánimo, la motivación y la energía) y alteraciones en la melatonina que pueden producir trsiteza, pensamientos negativos, cansancio, sentimientos de culpabilidad, entre otros. - En zonas donde hay mucho viento se asocia con sensación de irritabilidad, agobio, insomnio y fatiga. También con nerviosismo, problemas de concentración y dolores de cabeza. - En casos de olas de calor bruscas pueden descompensar a pacientes con ciertos trastornos mentales graves. En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda, es importante tener en cuenta como influyen estos factores en nuestro estado de ánimo, sobre todo en personas que ya se encuentran en manos de profesionales de la salud mental, para así poder llevar a cabo un buen seguimiento y apoyo ante la posibilidad de experimentar alguno de estos síntomas.
Por Instituto Carbonell 5 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando alguien rompe una relación y deja un vacío lleno de dolor, es normal sentirse destrozado y vivir un proceso de duelo. Subraya que no se puede forzar a otra persona a quedarse, por lo que lo esencial es aceptar su decisión y empezar a mirar por uno mismo. Recomienda dar espacio, cortar los contactos que dificulten la recuperación y permitirse sufrir sin buscar compensaciones inmediatas. Señala que este tiempo de reconstrucción personal ayuda a reconectar con uno mismo, crecer y transformarse en una mejor versión, recordando que siempre habrá luz al final del túnel.
Por Instituto Carbonell 4 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando el sexo en pareja deja de ser satisfactorio, lo fundamental es hablarlo con claridad y complicidad , aunque resulte difícil expresarlo. Señala que es importante comunicar si el deseo ha cambiado o si la experiencia ya no resulta gratificante, y hacerlo sin miedo, buscando soluciones conjuntas. Recomienda, además, recurrir a un terapeuta o especialista en sexualidad si la comunicación directa no basta, de manera que se pueda intentar recuperar la conexión antes de considerar el fin de la relación.