Cómo ayudar a alguien que está sufriendo un ataque de pánico

15 de abril de 2019

Los ataques de ansiedad o de pánico se caracterizan por una sensación de terror muy intensa que suele acompañarse de síntomas como taquicardia, dificultades respiratorias, mareos, hormigueo o náuseas . En algunos casos, la persona que lo padece tiene la sensación de que va a morir .


Estos ataques son muy frecuentes en nuestra población: cerca de un 13% de las personas los ha experimentado, por lo que es importante conocer este fenómeno, sus síntomas y de qué forma podemos ayudar a alguien que lo esté sufriendo.


Un reciente artículo publicado por Amy Sedghi en The Guardian el 4 de marzo de 2019 enumera ciertos consejos a seguir a modo de ayudar a alguien que está sufriendo un ataque de pánico:


1. Conoce de qué se trata . Si alguien cercano a nosotros sufre ataques de pánico y nosotros lo sabemos, comprender exactamente en qué consisten y entenderlos mejor puede servir de ayuda. Los ataques de pánico pueden durar entre 5 y 30 minutos, y sus síntomas más comunes son una respiración agitada, sudor, temblores y taquicardia.


2. Mantén la calma. Para las personas que sufren un ataque de ansiedad, estar acompañados de alguien que se muestra tranquilo normalmente les resulta reconfortante y ayuda a su relajación. Se recomienda intentar tranquilizar a la persona recordándole de forma calmada que el ataque pasará.


3. Intenta tranquilizar a la persona. La persona que lo vive experimenta una sensación muy intensa y desagradable, tanto que algunas lo describen como un infarto o creen que van a morir. Por eso, es importante recordarle a la persona que lo sufre que no está en peligro: normalmente dura unos 10 minutos y una vez que ha llegado a su máxima intensidad, lo siguiente que pasa es que se reduce la sensación de malestar hasta llegar a desaparecer.


4. Anímalo/a a respirar profundo. Las respiraciones lentas y profundas favorecen que la persona se tranquilice más rápidamente. Es una buena idea realizar esas respiraciones con él/ella.


5. Ten cuidado con desestimarlo. La experiencia que se vive durante un ataque de ansiedad es realmente intensa, por lo que no desestimes lo que está sucediendo. Evita comentarios como “no entres en pánico” o “no te pongas nervioso/a”. Aunque se digan con buena intención, frases de este tipo hacen que la persona no se sienta comprendida y esa sensación es la que queremos evitar durante el ataque de pánico.


6. Utiliza técnicas para centrarse en algo del presente. Uno de los síntomas de los ataques de pánico es la sensación de que por unos momentos nuestro cuerpo no nos obedece ni nos pertenece. Por eso es buena idea utilizar algunas técnicas para enfocarse en algo concreto del presente. Por ejemplo, si le damos algún objeto como un pañuelo, podemos pedirle que se concentre en su textura y en la sensación que le produce en las manos.


7. Pregúntale qué necesita. Normalmente después de sufrir un ataque de pánico la persona está muy cansada. También puede que siga teniendo algún temblor o que tenga calor. Ofrécete a traerle un vaso de agua o algo para comer. Además, cuando ya se ha recuperado, está bien que le preguntes qué creen que les sirve de ayuda durante o después de un ataque de pánico.


En opinión del Dr. Carbonell los ataques de pánico son un hecho mucho más frecuente de lo que parece y deberíamos estar preparados para saber cómo actuar ante uno de ellos. De todas formas, hay que tener en cuenta que aunque estas técnicas sirven de mucha ayuda durante el ataque de ansiedad, es necesario acudir a un profesional de la salud mental para poder tratar el trastorno de ansiedad que haya detrás de esta sintomatología .


Por Instituto Carbonell 29 de diciembre de 2025
Muchos españoles hacen una lista de propósitos y metas para el nuevo año que se aproxima, pero surge una pregunta clave: ¿realmente se cumplen? Entre los propósitos más comunes que la gente suele proponerse se encuentran dejar de fumar, bajar de peso, hacer ejercicio o aprender un idioma, entre otros. Sin embargo, según una publicación del Journal of Clinical Psychology , solo un pequeño porcentaje de las personas logra cumplirlos. Esto se debe, en muchos casos, a que se establecen metas poco realistas. A pesar de ello, la intención de fijar propósitos es positiva y beneficiosa, ya que permite rediseñar nuestras vidas y hábitos. Entonces, ¿es importante hacer una lista de propósitos? La respuesta es sí. Para aumentar las posibilidades de éxito, se recomiendan algunas acciones clave:  Establecer metas claras y específicas. Planificarlas con anticipación. Agendarlas en un lugar visible para mantenerlas presentes y evitar que se conviertan en una carga mental. Reflexionar periódicamente sobre los objetivos. En opinión del dr. Carbonell, es vital proponerse nuevos hábitos que mejoren nuestra calidad de vida, pero es fundamental que estos sean realistas para no generar falsas expectativas y frustraciones.
Por Instituto Carbonell 29 de diciembre de 2025
Desde InstitutoCarbonell, te recordamos los horarios que tendremos durante los días festivos. ¡Felices fiestas!
Por Instituto Carbonell 28 de diciembre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que lo positivo de una traición es el aprendizaje que nos deja sobre la confianza y los límites en nuestras relaciones. Nos enseña a discernir qué información es seguro compartir con amistades y qué conviene reservar para un entorno profesional, como un psicólogo o psiquiatra, que garantice confidencialidad. La traición evidencia que no todas las personas mantienen la lealtad con el tiempo, y este conocimiento nos ayuda a protegernos emocionalmente y a gestionar mejor nuestras relaciones futuras.