¿Hace tiempo que no sientes nada?

14 de enero de 2025

Sentir que ya no experimentas emociones por tu pareja puede ser una situación muy desconcertante, especialmente si estás en la relación que siempre soñaste. Para abordar este problema, es importante reflexionar y actuar con claridad.

1. Evalúa tu estado personal: A menudo, el estrés acumulado, las responsabilidades diarias o incluso problemas emocionales propios pueden afectar la conexión con tu pareja. Antes de asumir que el problema radica en la relación, dedica tiempo a cuidar de ti mismo. Considera realizar actividades que te hagan sentir bien y, si es necesario, busca el apoyo de un terapeuta para identificar posibles bloqueos emocionales.

2. Revisa la dinámica de la relación: Si concluyes que tu bienestar personal no es la causa, evalúa cómo está funcionando tu relación. Habla con tu pareja y plantea tus sentimientos de forma abierta. A veces, el desgaste puede solucionarse reavivando la relación con nuevos planes, actividades conjuntas o simplemente mejorando la comunicación.

3. Si persiste la desconexión emocional: Si, a pesar de cuidar de ti mismo y trabajar en la relación, sigues sin sentir nada, podría ser momento de considerar una conversación sincera sobre el futuro de la relación. Terminarla con respeto puede ser la mejor decisión para la salud emocional de ambos.

Cuidar de tu bienestar y del de tu pareja siempre debe ser la prioridad, incluso si eso implica tomar decisiones difíciles.

Por Instituto Carbonell 14 de octubre de 2025
Los cambios estacionales como las altas temperaturas o el frío pueden suponer un papel importante en la variación emocional de algunas personas, pero más allá de esto, los ciclos anuales de invierno, primavera, verano y otoño, también pueden interferir en el comportamiento y estado de ánimo.  En el artículo Echeburúa, E. denomina a este suceso como “meteorosensibilidad”, esto se puede manifestar de diferentes formas: - En zonas geográficas o épocas en las que hay inviernos largos con poca luz solar se produce una disminución de serotonina (neurotransmisor clave para el estado de ánimo, la motivación y la energía) y alteraciones en la melatonina que pueden producir trsiteza, pensamientos negativos, cansancio, sentimientos de culpabilidad, entre otros. - En zonas donde hay mucho viento se asocia con sensación de irritabilidad, agobio, insomnio y fatiga. También con nerviosismo, problemas de concentración y dolores de cabeza. - En casos de olas de calor bruscas pueden descompensar a pacientes con ciertos trastornos mentales graves. En opinión del Dr. Carbonell y M. Miranda, es importante tener en cuenta como influyen estos factores en nuestro estado de ánimo, sobre todo en personas que ya se encuentran en manos de profesionales de la salud mental, para así poder llevar a cabo un buen seguimiento y apoyo ante la posibilidad de experimentar alguno de estos síntomas.
Por Instituto Carbonell 5 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando alguien rompe una relación y deja un vacío lleno de dolor, es normal sentirse destrozado y vivir un proceso de duelo. Subraya que no se puede forzar a otra persona a quedarse, por lo que lo esencial es aceptar su decisión y empezar a mirar por uno mismo. Recomienda dar espacio, cortar los contactos que dificulten la recuperación y permitirse sufrir sin buscar compensaciones inmediatas. Señala que este tiempo de reconstrucción personal ayuda a reconectar con uno mismo, crecer y transformarse en una mejor versión, recordando que siempre habrá luz al final del túnel.
Por Instituto Carbonell 4 de octubre de 2025
El Dr. José Carbonell explica que cuando el sexo en pareja deja de ser satisfactorio, lo fundamental es hablarlo con claridad y complicidad , aunque resulte difícil expresarlo. Señala que es importante comunicar si el deseo ha cambiado o si la experiencia ya no resulta gratificante, y hacerlo sin miedo, buscando soluciones conjuntas. Recomienda, además, recurrir a un terapeuta o especialista en sexualidad si la comunicación directa no basta, de manera que se pueda intentar recuperar la conexión antes de considerar el fin de la relación.