El efecto del consumo de alcohol en la salud mental

18 de septiembre de 2017

Hoy en día se ha trivializado el consumo de alcohol y mucha gente ignora el efecto a largo plazo que tiene en nuestra salud. Por ello en el artículo alcohol consumption and brain health publicado por el neuropsiquiatra Killian Welch en el British Medical Journal en junio de 2017 se ha hecho un seguimiento a 550 personas de una media de 43 años durante 30 años ( 1985-2015) para ver el efecto que tiene el consumo de diferentes cantidades de alcohol en el cerebro. Este seguimiento consistió en realizar una resonancia magnética al final del estudio y valorándose como resultado final los cambios en neuroimágen y el deterioro cognitivo.

Los resultados indicaron que un 20% de los hombres y un 13% de las mujeres bebían en exceso ( más de 21 o 14 unidades de alcohol respectivamente). Además, el mayor consumo también estaba asociado con una peor integridad de la sustancia blanca y un declive cognitivo más rápido en la fluidez verbal. Se observa una pérdida en las capacidades de un 14% en los consumidores leves con respecto a los que no consumen alcohol.

Por otra parte, el consumo del alcohol está muy relacionado con la probabilidad de sufrir atrofia en el hipocampo, una zona del cerebro especialmente relacionado con la memoria. Por ello se comparó esta atrofia en diferentes tipos de consumidores y se concluyó que los grandes consumidores de alcohol tenían alrededor de 6 veces más probabilidades de sufrir atrofia hipocampal que los que no bebían alcohol y que incluso los que consumían alcohol de forma moderada tenían 3 veces más probabilidades de sufrir atrofia del hipocampo derecho. Por ello, el consumo de grandes bebedores está asociado con problemas importantes de memoria y de la función ejecutiva.

Teniendo en cuenta la estrecha relación entre las demencias y los problemas de memoria, no son de extrañar los hallazgos de este estudio que indican que el alcohol aumente en un 10% la posibilidad de sufrir una demencia temprana y explica entre el 10-24% de los casos de demencia en residencias. Así pues, la concienciación e intervención temprana sobre el tema es de vital importancia, no solo para evitar problemas crónicos, sino por la posibilidad de revertir algunos efectos empezando un tratamiento.

Este estudio también analiza los efectos del alcohol en la salud general, debido a la creencia popular de que hay un efecto protector en la salud por beber pequeñas cantidades de alcohol. Así pues, el estudio no solo desmiente esta creencia sino que se pone de manifiesto un efecto perjudicial, pues incluso esta mínima cantidad tiene un riesgo superior a la abstinencia en patologías como cáncer de pecho. Según el autor este estudio es de gran utilidad a la hora de discutir con los pacientes los posibles beneficios del alcohol sobre la salud, pues en ningún caso la evidencia de posibles beneficios del alcohol no justifican a que los abstemios beban. A nivel general podemos ver que a medida que incrementa el consumo incrementa el riesgo de la salud .

En opinión el Dr. Carbonell lo que queda claro de nuevo es que incluso el consumo moderado de alcohol está asociado con cambios patológicos en el cerebro y que de ninguna manera el consumo leve de alcohol tiene un efecto protector sobre la estructura o función cerebral. Más bien todo lo contrario ya que hay una relación dosis dependiente entre la cantidad de alcohol y la atrofia del hipocampo.

Por Instituto Carbonell 25 de abril de 2025
El Dr. José Carbonell, médico y psiquiatra, lanza un mensaje directo y necesario: ir al psiquiatra no debería ser motivo de vergüenza ni de estigma . En pleno siglo XXI, aún existen personas que sienten miedo o pudor al decir que acuden a un profesional de la salud mental. Esto, según el doctor, es algo que necesitamos cambiar urgentemente. Carbonell explica que un psiquiatra es, ante todo, un médico , como cualquier otro especialista. La gran diferencia con el psicólogo es que el psiquiatra, además de abordar lo emocional, también evalúa el componente biológico y orgánico de los trastornos mentales. Esto incluye valorar si el paciente tiene otras enfermedades, está tomando medicación que pueda influir en su estado anímico, o si su salud mental afecta funciones como el sueño, el apetito o la energía, llegando incluso a requerir medicación. El propósito de este mensaje no es solo aclarar conceptos, sino también normalizar y visibilizar la importancia de acudir a un profesional cuando uno no se siente bien . Cuidar la salud mental no es un signo de debilidad, sino de responsabilidad y amor propio. Así como vamos al dentista cuando tenemos un dolor de muelas, también debemos ir al psiquiatra o al psicólogo cuando sentimos que algo no está funcionando bien en nuestro mundo interno. El Dr. Carbonell invita a dejar atrás el estigma, a romper esa barrera cultural que durante tantos años nos ha impedido hablar abiertamente de nuestros malestares emocionales, y a reivindicar la salud mental como un pilar del bienestar integral . En sus palabras, "mantener una higiene mental es la consecuencia de un trabajo que vamos haciendo cada día".  Este mensaje no solo va dirigido a quienes ya están en tratamiento, sino también a quienes aún dudan en dar el paso. Porque pedir ayuda es valiente , y porque hablar de salud mental es el primer paso para sanar y crecer.
Por Instituto Carbonell 24 de abril de 2025
Aprender a no darlo todo – Estrategias para superar el perfeccionismo
Por Instituto Carbonell 24 de abril de 2025
El Dr. José Carbonell, médico y psiquiatra, reflexiona en este mensaje sobre una de las trampas emocionales más comunes tras una ruptura o una gran discusión de pareja: quedarnos esperando . Muchas veces, después de que una relación se rompe, nace la esperanza de que tal vez todo vuelva a su cauce, de que la persona con la que compartíamos la vida reflexione, cambie y regrese. Nos aferramos a la idea de que lo que fue puede reconstruirse, de que ese proyecto de vida que diseñamos juntos aún puede tener sentido. Sin embargo, Carbonell advierte que esta espera nos paraliza y nos hace perder tiempo vital . Mientras deseamos que la otra persona reconsidere sus decisiones, dejamos de vivir el presente. Posponemos nuestra recuperación emocional, nuestras metas personales y, lo más grave, nuestra vida misma, esperando algo que tal vez nunca suceda. Además, el doctor señala que, muchas veces, la otra persona ya está en otra etapa , ha dado pasos hacia adelante e incluso puede haber pasado de un sentimiento de amor a indiferencia o rechazo. En cambio, quien espera se queda anclado a un pasado idealizado que ya no existe. Vivir de esa forma es hipotecar el futuro por una esperanza que no depende de nosotros. Por eso, el llamado es claro: deja de esperar . Centra tu atención en ti, en reconstruir tu autoestima, en recuperar tus proyectos, tu bienestar, tus ilusiones. Invierte en ti y en tu vida sin estar condicionado por lo que otra persona haga o deje de hacer. Solo así podrás avanzar, crecer y abrirte a nuevas experiencias que sí estén alineadas con tu presente y con tu valor.  Carbonell concluye animando a compartir experiencias sobre cómo cada uno ha gestionado este tipo de situaciones, reconociendo que sanar es un proceso individual pero más llevadero cuando se hace en comunidad y con consciencia.